martes, 10 de abril de 2012

Científicos crean oído mas pequeño del mundo

¿Te has preguntado como suena un virus? O ¿qué ruido hace una bacteria que se mueve? Si la respuesta es sí, puede que pronto exista una oportunidad de descubrir todo esto, gracias al desarrollo de los oídos más pequeños del mundo. La "nano-oreja", una partícula microscópica de oro atrapada por un rayo láser, pueden detectar un sonido débil millones de veces más que el umbral para el oído humano. Los investigadores sugieren que el trabajo podría abrir todo un nuevo campo de "La microscopía acústica", en el que los organismos son estudiados con el sonido que emiten.



El concepto de la nano-oreja comenzó con un invento 1986 se conoce como pinzas ópticas. Las pinzas utilizan un rayo láser enfocado a un punto con una lente que agarra pequeñas partículas y se mueven a su alrededor. Se han convertido en una herramienta estándar en la biología molecular y la nanotecnología, ayudando a los investigadores a inyectar ADN en las células e incluso manipularlo una vez dentro. Las pinzas ópticas también se puede utilizar para medir las fuerzas que actúan sobre minúsculas partículas microscópicas, una vez que hayas agarrado de su partícula con el rayo láser, en lugar de moverlo usted mismo, sólo tiene que utilizar un microscopio u otros aparatos de vigilancia apropiados, para ver si se mueve por su propia cuenta. Ahí es donde el nano-oído entra en juego.

Las ondas de sonido viajan como un desplazamiento hacia delante y hacia atrás de las partículas que atraviesan. Así que para detectar el sonido, es necesario medir este movimiento de adelante hacia atrás.El físico Jochen Feldmann y sus colegas en el Grupo de Fotónica y Optoelectrónica de la Universidad de Munich en Alemania utiliza una partícula de oro de 60 nanómetros de diámetro, sumergido en el agua, y se mantiene en pinzas ópticas.

Equipo de Feldmann registraron y analizaron los movimientos de esta partícula en respuesta a las vibraciones acústicas causadas por el calentamiento inducido por láser de las nanopartículas de oro en el agua cercana. Así como tener una sensibilidad sin precedentes, su nano-oreja también podría calcular la dirección de donde se origino el sonido. Los autores sugieren tres dimensiones en las matrices de nano-oídos trabajando juntos podría ser utilizadas para escuchar las células o microorganismos tales como bacterias y virus, que emiten vibraciones acústicas muy débiles que se mueven y respiran. "Hay oportunidades sin duda médica que podemos abordar en conjunto con la gente adecuada", Feldmann dice, "pero sólo tenemos que ver cómo funciona en primer lugar."

No hay comentarios:

Publicar un comentario